jueves, 24 de noviembre de 2011

VOR A MENOS DE MIL MILLAS DE CIUDAD DEL CABO

Menos de mil millas ya para llegar a la ansiada Ciudad del Cabo. Se espera que el primero llegue durante este fin de semana, y que este salvo avería sea el Telefónica. El barco español está a las 22:15 de hoy jueves  a 813 millas de la meta y con una ventaja de 108 millas sobre Camper que ya se ha quedado con menos viento, y de peor ángulo. Camper navega diez grados más alto que Telefónica con lo que ahora no puede hacer rumbo directo. Groupama por su parte, se ha quedado descolgado del frente que cabalga Telefónica, y navega casi ocho nudos más lento y con un rumbo terrible. Acaba de trasluchar rumbo sur para tratar de pillar otro frente.




El Team Telefónica mantendrá más tiempo el viento, y seguirá promediando buenas velocidades, aunque parece que el record de 24 ya no lo batirá pues el viento le irá bajando y rolando. Tendrán una zona de poco viento antes de llegar a Sudáfrica, pero la ventaja que llevan, y la que sacarán esta noche, debería ser suficiente para llegar los primeros.

A Puma es al que se le están complicando las cosas. Siguen navegando a motor hacia Tristán da Cunha, pero no tienen claro el barco que les irá a buscar ni cuando. Parece que tienen mucha fe en su plan, pero según mis cálculos, ya están casi en el límite de llegar a tiempo para la salida de la segunda etapa. Si la isla está a más de mil millas, eso son por lo menos dos o tres días de mercante de ida y otros tantos de vuelta, más el día de carga del barco en la remota Isla de Tristán. Todavía les falta por lo menos otro día para llegar a Tristán a motor, por lo que para toda la operación mínimo diez días. Eso los colocaría en sudáfrica un par de días antes de la salida, muy justo. Por el bien de la Volvo y del espectáculo espero que lo logren, pero estarán muy justos.

Así la cosa queda con Telefónica devorando millas camino de la victoria de etapa, Camper al acecho, esperando un cambio en el viento o rotura para tener su oportunidad, y Groupama, para mi la gran decepción de esta primera etapa, muy muy descolgado. El resto, porque si, eran seis, uno llegando a Sudráfrica para que le cambien la proa, otro a motor en medio de la nada, y otro viajando en mercante. Ahora mismo está más interesante la regata fuera del agua que en ella.


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